La restauración sostenible es un enfoque de gestión de un negocio de restauración que, además de los objetivos de crecimiento económico, Pone la protección y el respeto al medio ambiente en primer plano, conscientes de que el futuro del planeta depende de la capacidad de reducir el impacto de las actividades económicas sobre él, así como de la promoción de prácticas éticas y responsables.
La sostenibilidad como herramienta de valor y crecimiento
En todo el mundo, las personas están cada vez más atentas al tema de la sostenibilidad, es decir, evalúan sus compras de bienes y servicios también en términos de Capacidad de las marcas para tener un impacto positivo en el medio ambiente y la sociedad.
Esta tendencia También se refleja en el mundo de la restauración., donde los clientes buscan experiencias que no sólo satisfagan su paladar, sino que también estén alineadas con sus valores. Restaurantes y locales que demuestran Atención al medio ambiente, reducción de residuos y adopción de prácticas sostenibles. tienen más probabilidades de atraer y retener un segmento de consumidores que será cada vez más grande con el tiempo. Optar por la sostenibilidad es, por tanto, una elección ganadora: una elección ética, ante todo, pero con la capacidad de tener También tiene un impacto muy positivo en el crecimiento del negocio.
Estrategias de restauración sostenible rápidas y eficaces
Se podría escribir un libro sobre la sostenibilidad en el sector alimentario. Aquí, sin embargo, nos limitamos a Proporcionar algunas ideas a los operadores de restaurantes., para reflexionar y tomar decisiones informadas.
- La primera estrategia es adoptar un compromiso serio hacia reducir el desperdicio de alimentos. Éste es el punto fundamental, que no puede faltar en ningún caso. Esto se puede lograr de distintas maneras, pero lo más notable es la planificación cuidadosa del menú, la selección de ingredientes versátiles y la reutilización (cuando sea posible y apropiado, por supuesto) de los ingredientes.
- Otra acción significativa es la selección de materias primas locales y de temporada. Además de las bondades de los productos locales, que no requieren técnicas de conservación agresivas, esto reduce las emisiones relacionadas con el transporte y apoya las economías locales.
- La transparencia es entonces un elemento clave. Informar a los clientes sobre el origen de los ingredientes y las prácticas adoptadas mejora la percepción del lugar, crea una sensación de autenticidad y fortalece el vínculo con los clientes. Si el modelo de negocio incluye una opción llevarEl uso de envases biodegradables o reciclables es otro paso en la dirección correcta.
- Sin embargo, la correcta gestión energética es secundaria (frente a las demás) pero también merece consideración, pues repercute no sólo en las facturas (y por tanto en la sostenibilidad económica del negocio), sino también en el planeta. Además de utilizar equipos modernos y eficientes, también es deseable adoptar fuentes de energía renovables, mediante la instalación de paneles solares o utilizando proveedores de energía verde.
El papel de Pinsa en la restauración sostenible
Creemos que pinsa puede tener un impacto positivo en la idea de restauración sostenible y puede ser un aliado para actividades atentas a su impacto ambiental y social. Veamos por qué.
Es un alimento sencillo y versátil.
La pinsa se suma a la tendencia de la restauración sostenible gracias Por su sencillez y versatilidad. En cuanto al primer punto, la pinsa se elabora con unos pocos ingredientes naturales –harina, agua, levadura, una pizca de aceite y sal– y no requiere procesos de transformación complicados ni especialmente energéticos. La ausencia de procesos industriales complejos lo convierte en un producto intrínsecamente más sostenible que muchos otros, además de mantener su autenticidad y pureza, que se traducen en la bondad del producto final.
Pinsa es anti-desperdicio de origen
Otro punto fuerte de la pinsa es su carácter antidesperdicio. Para la industria gastronómica, la pinsa Di Marco está disponible no sólo como mezcla de harina, sino también precocida y congelada, con una vida útil de hasta 18 meses. Esto permite a los restauradores Gestionar el inventario de forma más flexible, reduciendo el riesgo de tener que tirar productos no vendidos.
Pinsa es también un producto naturalmente versátil, y esto encaja muy bien con el concepto de restauración antidesperdicio. Se puede utilizar como Base para una amplia gama de platos: como plato principal servido con variedad de condimentos, pero también cortado en porciones más pequeñas y servido como aperitivo o aperitivo, adaptándose perfectamente a entornos informales o de buffet.
La característica de ser “modular” permite utilizar cada porción individual de manera eficiente, evitando el desperdicio y asegurando que los excedentes encuentren un uso concreto, en beneficio de los clientes, del negocio y de la sostenibilidad. Por ejemplo, una pinsa que no se consume como plato principal se puede cortar en gajos y reutilizar durante el servicio para acompañar una bebida o como parte de un antipasto mixto.
Se prepara y cocina en 5 minutos (literalmente)
Generalmente consideramos la velocidad de preparación en términos de beneficio económico (para el restaurador) y beneficio experiencial (para el cliente). En realidad, los cortos tiempos de preparación, ya sea que se parta de una mezcla de harinas o de una base precocida, son otro aspecto que lo hace interesante también en términos de sostenibilidad. En particular, el tiempo de cocción reducido y la simplicidad del producto. permite un importante ahorro energético y optimiza el uso de los recursos.
La base ideal para catering de kilómetro cero
Gracias a su base neutra y versátil, la pinsa se puede utilizar como El vehículo ideal para realzar los ingredientes locales y de temporada., que son la base de la restauración kilómetro cero. Los restauradores que quieran adoptar una filosofía de sostenibilidad pueden llenar fácilmente la pinsa con productos locales, como verduras de temporada, quesos artesanales o embutidos de pequeños productores locales. De esta manera, no sólo se reduce el impacto ambiental ligado al transporte de ingredientes, sino que También se promueven las economías locales y se garantiza la máxima frescura y calidad de los platos.